En la noche de ayer, Hugo Arana recibió en el Teatro Municipal el Premio Lucas a la Trayectoria actoral de manos del Subsecretario de Cultura, Educación y Turismo Eduardo Rodríguez. Previamente, había sido homenajeado por los internos de la Unidad 38 en el marco de la 5ª Muestra de Cine en la Cárcel, actividad paralela a la Lucas Demare. El actor, emocionado, agradeció a los organizadores por "este mimo tan grande" y destacó, mientras se oían los aplausos del público, que esperaba "que no quede en un gesto de idolatría sino que le sirva a cualquiera, en lo que sea que haga".
Arana, quien luego de casi 30 años regresó a la Lucas Demare –recordaba su visita a inicios de los '80, cuando se realizaron las primeras ediciones de la Muestra- visitó durante la tarde la Cárcel de Sierra Chica, donde los internos le entregaron una estatuilla en homenaje; y por la noche participó de una entrevista pública realizada por Jorge Arabito en el hall del Teatro. Allí vertió algunos conceptos sobre su visita al penal, destacando que si fuera autoridad daría teatro en las cárceles y las escuelas "no porque defienda mi profesión o el teatro sea la verdad, sino porque permite recorrer la obra de grandes autores que han reflexionado sobre la condición humana, y porque la posibilidad de actuar es un juego que recupera al niño, y el niño es la parte de la vida más sana, jugando y jugando uno recorre lo que lo habita" y agregó "lo que es, la actuación permite es no estar uniformado, no ser como todos sino que cada uno pueda encontrar su zona sagrada, su zona única”.
Durante la entrevista reflexionó sobre lo que significa para él la actuación: "es una profesión que me ayuda a tratar de saber quién soy, a qué me refiero cuando digo "yo". Porque construir personajes hace que uno busque en su interior, porque tenemos a todos: a la Madre Teresa, a Hitler, somos todo" Y amplió "es una gran aventura, una tarea infinita, uno es infinito y sorprendente siempre; nunca existe la misma situación, cada experiencia nos modifica. Y siempre sentí que en esa búsqueda la actuación me ayuda como persona, me mejora, que puedo tomar distancia y no quedarme pegado a lo que me sucede. En ese sentido, destacó el valor del humor como herramienta "cuando uno pude tomar distancia de lo que le pasa y reírse de sí mismo, ver la cantidad de ridiculeces que uno hace, mejora como persona".
Luego fue acompañado por el público que estaba atento a sus palabras a recibir el premio, con una humildad conmovedora. El acto fue precedido por palabras de Andrea Góngora quien recorrió parte de su historia en el cine argentino, y un video que lo mostró en los distintos papeles que ha interpretado para la pantalla grande.
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